¿Qué es arte y qué no lo es? Esa es la eterna cuestión que nos ocupa. Recuerdo un trabajo que me propuso una profesora de historia del arte que consistía en responder a éste interrogante. En aquel momento me sentí muy perdida y traté de ser crítica pero abierta. Han pasado muchos años, con sus correspondientes visitas a exposiciones, galerías y museos, durante los cuales he desarrollado mi propia teoría de qué es arte y qué no. Aquí voy a intentar argumentarla y ejemplificarla, ¡comencemos!
Cuando veo una obra de arte, me pregunto varias cosas:

1 ¿Cómo lo ha hecho? me gusta más si no lo sé. A esto lo llamaremos Técnica Misteriosa

Adam Summers tiñe ejemplares de peces para revelar su anatomía, y no sé cómo los tiñe ni cómo los fotografía.

2 ¿Se ha inventado un nuevo método? me gusta más si ha hecho su obra de una manera no vista anteriormente, aunque al verlo se entienda cómo lo hizo. A esto lo llamaremos Pionero.

Dalton Guetti esculpe minas de lapiceros. Aunque no ha inventado la escultura, sí el aplicarla a este objeto.

3 ¿Cuánto ha (o han, a menudo los artistas tienen verdaderos ejercitos de esclavos a su cargo) tardado? me gusta más si es un trabajo complicado de hacer. A esto lo llamaremos Difícil.

Jennifer Maestre hace esculturas con puntas de lapiceros

4 ¿Cuál es la idea? me gusta más si lo que entiendo me parece retorcido, irónico y/o simbólico. A esto lo llamaremos Sinuoso.

Maurizio Cattelan nos presenta al papa derribado por un meteorito

5 ¿Lo querría en mi casa? me gusta más si me provoca emociones positivas. A esto lo llamaremos Agradable.

Me encantaría tener en casa esta Victoria de Samotracia de Yves Klein

6 ¿Denuncia algo? me gusta más si es una especie de registro histórico del momento en que se hizo, reflejando una causa que preocupa al artista y a la gente de su tiempo. A esto lo llamaremos Denuncia.

La Máquina para salvar el mundo de Ralf Sander recibe energía solar y escupe nieve, una denuncia del cambio climático.

7 ¿Su tema es atemporal? me gusta más si trata un tema con el que se pueden identificar personas de todas las épocas . A esto lo llamaremos Atemporal.

La Venus de Willendorf representa la naturaleza, fertilidad, maternidad y la creación: temas que son inherentes a la vida y al ser humano.

8 ¿Es precursor de algo más? me gusta más si ha servido para inspirar a otros artistas. A esto lo llamaremos Precursor.

Wassily Kandinsky, precursor del arte abstracto. Aquí vemos su primer «sin título» de 1910.

9 ¿Cuenta algo sobre el artista? me gusta más si es un reflejo de su personalidad o su vida. A esto lo llamaremos Personal.

Chino Otsuka se inserta a sí misma en las fotos de su infancia ¿Quizás hubiera querido tener una hermana mayor?

10 ¿Cuándo lo ha hecho? me gusta más si me parece novedoso para su tiempo. A esto lo llamaremos Precoz.

En su «Collage ordenado según las leyes del azar» de 1916, Hans Arp se atrevió a abrazar lo irracional. Así nació el «antiarte» o dadá.

Todo esto quiere decir que cada uno de estos factores (si es lo suficientemente fuerte) puede servir para identificar una obra de arte por sí solo, pero a menudo necesitamos varios para que de verdad nos convenza. Por otro lado, las obras maestras necesitan de muchos ingredientes para serlo. ¿Se te ocurren más ejemplos?

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